Una combinación efectiva de psicoterapia e hipnoterapia puede ayudar incluso en la primera sesión con traumas familiares profundos y duraderos.

Hoy quiero animarte con un caso real en el que, junto con el cliente, logramos una mejora significativa.

Situación dolorosa del cliente

A menudo llevamos diversas heridas psicológicas desde la infancia. También mi cliente, una mujer de 58 años, me contactó debido a una situación que la había estado molestando durante varios años. Durante mucho tiempo sentía que su madre prefería a su hermano. Siempre le prestaba más atención y apoyo (tanto emocional como material), le toleraba más errores… incluso prefería a los hijos de su hermano antes que a los de mi clienta.

Tras la muerte de su hermano y su padre, la clienta tuvo que cuidar de su madre, que quedó sola. Según la descripción de la clienta, las visitas a su madre eran insoportables. La madre criticaba o ignoraba a su hija. La clienta sentía ira y frustración, así como tristeza por el pasado y el presente. Ella quería mejorar la relación con su madre, al menos en sus últimos años, pero la relación no mejoraba, sino empeoraba. En los días en que debía visitar a su madre, la clienta experimentaba ansiedad y frustración. Finalmente decidió buscarme y pedir ayuda. Sugirió que estaba dispuesta a probar la hipnosis.

Sesión de psicoterapia e hipnoterapia

En realidad, solo tuvimos una sesión. En la primera parte de la reunión, hablamos para comprender en qué debíamos centrarnos durante la hipnosis. Incluso en esta etapa, la cliente mencionó que había obtenido inspiración y una perspectiva completamente diferente sobre cómo percibía la situación en la que se encontraba. A través de preguntas, comenzó a ver nuevos aspectos de la relación y a comprender la perspectiva de su madre. La clienta comenzó a interpretar el comportamiento de su madre como: los padres se preocupan más por los hijos que lo necesitan y menos por aquellos que son fuertes y pueden arreglárselas por sí mismos. Finalmente, la cliente confirmó esta perspectiva con su madre, quien la respaldó.

En la segunda parte de la sesión, nos adentramos en la hipnosis, que duró unos 20 minutos. Nos centramos en desarrollar la capacidad de "no verse afectado por el mundo exterior" y en mantener la distancia mental y la paz. Después de la hipnosis, la cliente se sintió muy bien, hasta el punto de que sabía que no sería necesario otro encuentro.

Los resultados

Me reuní con la cliente después de 2 meses. Agradeció la ayuda. Según ella, desde nuestra reunión, disfruta de las visitas a su madre, hasta el punto de que está ansiosa por volver a verla. Según sus palabras, su madre también disfruta de su presencia. Su relación ha alcanzado su mejor nivel hasta ahora.

Evaluación del cliente

A continuación, puedes leer sus respuestas a mi cuestionario de retroalimentación.

¿Se han cumplido tus expectativas?

Sí, absolutamente. La terapia era como la última pieza del mosaico que me faltaba para terminar.

¿Cuál crees que es el valor añadido de la cooperación? ¿Qué te dio la cooperación?

Me he calmado por completo, he dejado de ocuparme de lo irremediable y siento una mayor armonía general en mi vida.

¿Qué te gustaría destacar?

Gran nivel de comprensión, proporcionándome una nueva perspectiva sobre el "problema" que yo no veía. Maravillosa voz tranquilizadora, muy buena para ponerte en profunda relajación. Satisfación total.

¿Recomendarías mis servicios a los demás - si es así, por qué? ¿Si no, por qué no?

Desde luego que sí. Excelente terapeuta con una profunda visión empática.

Este caso ilustra la poderosa combinación de psicoterapia e hipnoterapia que ayuda a activar el potencial humano para superar los desafíos. No siempre se logra en la primera sesión, pero con mi enfoque centrado en la solución, mi objetivo es que cada sesión sea la última.